Los platillos locales me conquistaron. No puedo olvidar el desayuno con huevos, frijoles y ese sabor casero que te hace sentir en casa. Además, el hotel está muy limpio y tiene agua caliente las 24 horas. Si solo pasas por Tula, este lugar cumple con lo que necesitas.

La ubicación es conveniente, con acceso a distintos sitios importantes a muy poca distancia. El personal fue amable y atento, siempre disponible para ayudar. La habitación que conocí contaba con comodidades óptimas. Si decides salir de noche, no hay problema, el guardia te atenderá de inmediato al llegar. Como amante de la buena comida, aprecio esas pequeñas atenciones en las estancias.

La habitación era un poco pequeña. El desayuno, aunque cumplía, no ofrecía una gran variedad y solo estaba disponible hasta cierta hora.

Spoiler, no te vas a arrepentir

Un hotel acogedor con una ubicación inmejorable a pasos de la catedral. Las habitaciones son cálidas y cómodas, perfectas para el frío de Tula. Aunque el estacionamiento es limitado, la limpieza es ejemplar y la atención del personal es atenta. Ideal para una estancia breve y con un toque de historia.

la habitación me decepcionó completamente, no tenía ni aire acondicionado ni teléfono, como si eso fuera aceptable. y ni hablar del desayuno, que solo se ofrece hasta las 9:30, parece que no se preocupan por los que no somos madrugadores. hubiera escrito una buena reseña, pero lo que me ofrecieron fue un fuerte desaire.

El estacionamiento es limitado, asegúrate de llegar temprano o estar preparado para dejar tu auto en la calle. La catedral está a pasos de distancia.

La atención del personal es amable y atenta.

La habitación era muy pequeña y el desayuno era limitado. Además, el estacionamiento es un verdadero problema. si no llegas temprano, tu auto tiene que quedarse en la calle. Me despertaron muy temprano para mover el vehículo, lo cual fue muy incómodo. La limpieza también dejó algo que desear, especialmente por el olor raro en la habitación.

Me alojé en el Real Catedral y me encantó la construcción antigua y acogedora. La ubicación es perfecta, a pasos de la catedral. Sin embargo, me faltó un poco de ventilación en la habitación. Aun así, el desayuno buffet estuvo delicioso y disfruté de la estancia.

la habitaciones son cómodas y tienen buena televisión, pero el desayuno es muy limitado.

un trozo de historia en pleno centro

desayuno delicioso, excelente ubicación

habitaciones pequeñas

El hotel real catedral es muy limpio y agradable. Me dejaron hacer el check-in antes de tiempo, lo cual fue un gran alivio. Además, la ubicación es excelente, justo enfrente de un estacionamiento que huele mal y es ruidoso. El gimnasio fue útil durante mi estancia.

Lo recomendaría.

La atención del personal, la ubicación privilegiada, el aparcamiento, el ambiente acogedor – simplemente excepcional!

maravilloso hotel en el corazón de tula con desayuno rico incluido

El hotel es una joya antigua con un ambiente acogedor y un servicio excepcional. La cama es muy cómoda, lo que me permitió descansar después de un día explorando la ciudad, y el desayuno buffet, aunque no era muy variado, era delicioso y cumplió con mis expectativas. Además, la ubicación es inmejorable, a tan solo unos pasos de la catedral y otras atracciones cercanas. Definitivamente lo recomendaría a quien busque una experiencia auténtica en Tula.

La ubicación es fabulosa y el personal fue muy amable. La cama estaba súper cómoda, perfecta para descansar después de explorar.

La habitación parecía una broma de mal gusto, ¡tan pequeña que hasta la ropa se sintió apretada!